Muchos aficionados llegaron al puerto los días previos a la etapa
Gran ambiente de público el vivido hoy entre Pola de Laviana y el Colláu Fancuaya para ver la octava etapa de la Vuelta. Muchos aficionados de Asturias y otros que llegados de más lejos no se quisieron perder la oportunidad de ver de cerca a sus ídolos. Desde Castellón llegaron Ricardo Blasco, Oriol Blasco y José Blasco, que viajan en autocaravana acompañados de sus bicicletas. «Queríamos ver y disfrutar de la Vuelta por el chiquillo y hemos venido aquí a la salida. Y de paso, hemos realizado una de las mejores rutas de mountain bike de aquí de la Pola de Laviana que es la Ruta del Carbón», dicen y añaden: «Nos ha gustado mucho esta zona, y esta ruta del carbón es una pasada, es indescriptible, hay que venir a hacerla y ya está».

Desde varios días antes de la fecha de la etapa ya se veía movimiento extraordinario de autocaravanas camino de Yernes, que llegaban al pueblo por las dos vertientes del puerto. La noche antes del día 27 de agosto ya estaban muchas de ellas estacionadas en los márgenes de la carretera. Como es el caso de los portugueses Antonio Tavera y Francisco Pinto, que pasaron la noche en el puerto y tuvieron «un poquito frío». Seguidores incondicionales de Joao Almeida, este año solo pueden ver en vivo esta etapa y por eso han venido a Asturias, donde ya han estado en más ocasiones viendo etapas en los Lagos de Covadonga y el Angliru. Mientras esperan la llegada de los ciclistas intentan disfrutar del paisaje, aunque «no se ve mucho porque con la niebla ahora no se puede contemplar».

Antonio Picón, trasplantado de corazón hace 23 años, de Aranda de Duero, y Santi Chao, trasplantado de corazón hace 21 años y de Viveiro (Lugo), se encuentran a 2 kilómetros del alto y han llegado hasta ahí en bicicleta. «Somos muy aficionados al ciclismo. Sí, y somos deportistas trasplantados que participamos en campeonatos internacionales y en nuestro campeonato de España. Y bueno, nuestra afición es el ciclismo y de hecho estamos aquí siguiendo la Vuelta este fin de semana por Asturias». Y es que, al final, el deporte también es una fiesta.

